

Formentera, 12 de septiembre 2025
El ritmo de vida tranquilo de Formentera se vio alterado el pasado jueves por un incidente que mantuvo en vilo a vecinos y cuerpos policiales. Un hombre de 38 años fue detenido tras protagonizar una serie de amenazas y mostrar actitudes violentas con lo que parecía ser un arma de fuego.
Lo hechos ocurrieron en la localidad de Sant Ferran, donde varios viandantes alertaron de la presencia del individuo caminando por la vía pública con una pistola en la mano. La alarma social creció rápidamente cuando el sospechoso empezó a increpar y a intimidar a quienes se cruzaban en su camino, llegando incluso a entrar en algunos establecimientos con la misma actitud.
La Policía Local dio aviso inmediato a la Guardia Civil, que desplegó un operativo por la zona. Los agentes organizaron una batida para localizar al sospechoso, mientras los testigos seguían aportando información sobre sus movimientos.
El episodio culminó con un momento de gran tensión: cuando los guardias civiles lograron interceptarlo, el hombre extrajo de la cintura el arma y apuntó contra los agentes amenazando con disparar a los agentes. Finalmente, fue reducido y arrestado sin que se produjeran heridos.
Arma simulada, alarma real
La rápida coordinación entre ciudadanía, Policía Local y la Guardia Civil permitió actuar con eficacia en una situación que generó alarma en la población. La batida organizada en los alrededores de Sant Ferran resultó clave para localizar al sospechoso en cuestión de minutos.
Aunque el arma incautada resultó ser simulada, la conducta del detenido fue considerada de extrema gravedad. Según recordó la Guardia Civil, este tipo de comportamientos pueden derivar en consecuencias fatales, ya que obligan a las fuerzas de seguridad a actuar como si se tratara de un arma real.
Cargos contra el detenido
El hombre fue acusado de un delito de amenazas, alteración grave del orden público y atentado contra agente de la autoridad. Las diligencias fueron remitidas a la autoridad judicial, que determinará su situación legal en los próximos días.
El incidente subrayó la importancia de la cooperación entre ciudadanos, cuerpos de seguridad y la rápida respuesta ante episodios que ponen en riesgo la convivencia en la isla. Aunque el arma no fuera real, la tensión vivida por vecinos y agentes evidenció las graves consecuencias que este tipo de conductas pueden acarrear.

Soy Ramón Tur, quien está detrás de todo lo que se escribe y fotografía en esta web sobre Formentera.
Descubrí la isla en 1972 cuando mis padres, a bordo de la mítica Joven Dolores, me llevaron por primera vez a pasar unos días de vacaciones desde Ibiza y aquello fue un amor a primera vista que, con el paso del tiempo, se ha reforzado hasta convertir Formentera en mi lugar de residencia desde hace ya muchos años.
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